Desmond Morris. El contrato animal

Este libro debería leerlo gran parte de la sociedad que ha perdido la orientación respecto a la posición del hombre en la Tierra.

Pese al valor que tiene en su totalidad, reproduzco dos extractos:

"Aparte del daño infligido a nuestro entorno físico, la obcecada carrera por dominar el mundo ha separado a nuestra especie de la importante verdad básica que afirma que somos animales y que formamos parte de una biosfera de influencias recíprocas. Hemos explotado interesantes innovaciones sin considerar sus posibles consecuencias negativas. La inventiva humana ha resultado ser como un nuevo fármaco cuyos posibles efectos secundarios nadie hubiese estudiado previamente. Hemos arrastrado nuestros cuerpos originarios hacia un campo de juego maravilloso y futurista, lleno de deliciosas distracciones. Nos hemos encandilado y, en ocasiones, hasta hemos considerado la posibilidad de que, después de todo, no fuéramos animales sino dioses. Como tales, por supuesto, seríamos inmunes a los azares de las leyes naturales, estando protegidos por nuestra sagrada condición.
La locura que encierra esta fantasía está ya siendo visulumbrada, por lo menos, en algunos de los sectores más ilustrados del mundo. "

"Al toro bravo se le permite vivir cuatro o cinco años, el doble que al típico toro de matadero para consumo, y durante esos años goza de todos los placeres que un bovino puede desear.....
Ésta es la defensa de la corrida de toros. Pero para el observador objetivo es difícil disfrutar de las expresiones que se ven en las caras de los expectadores. El toro tal vez sufra un poco menos de lo que dicen los adversarios de estos espectáculos, pero ¿cómo pueden las mentes que hay tras las caras del excitado público sentir más placer al ver morir al magnífico animal que al verlo seguir con vida? Si pueden tomar tanta distancia con respecto a los demás seres vivientes, es que se han tragado el peligroso cuento de que la humanidad está por encima de la naturaleza."